Al niño debe estimulársela a amar la naturaleza, al
disfrute de sus bellezas, a hacer el bien y la justicia, a rendir
culto a la honestidad, responsabilidad, tolerancia, amistad,
convivencia, paz, perennes valores morales, valores esenciales
susceptibles de ser reafirmados con la práctica de la recreación
como uno de los factores para el crecimiento, desarrollo físico y
mental del niño. No podemos dejar de mencionar que la recreación
infantil particularmente en la edad de preescolar, es uno de los
vehículos de aprendizaje, instrumento para satisfacer la natural
curiosidad del niño en sus etapas de crecimiento, de allí su
influencia a la educación con la cual contribuye a mejorar la
calidad de vida de las personas.